Por Ángel Arranz Izquierdo
La asociación nacional de organizadores de espectáculos
taurinos –ANOET- ha hecho y dicho un comunicado a todos los estamentos del
sector…alertándonos que: “la fiesta se acaba”.
Escribo y describo dicha organización con letras minúsculas
porque hace unos años –no sé ahora- había varias organizaciones con los mismos
o parecidos propósitos. Y había y hay organizadores que no pertenecen a
ninguna. Es decir, un pequeño grupo –normalmente “los más potentes”- se
atribuyen como mejores y únicas los análisis, soluciones y destinos genéricos
de la fiesta brava y de La Tauromaquia.
En mi opinión, que tampoco es la única o la mejor, el
comunicado no puede ser más destructivo, negativo y perverso… porque hay
verdades a medias, y porque hay ausencias de otras verdades enteras que no
mencionan o no se atreven a plantear y encarar. Son como los avestruces, o como
casi todos los presidentes de gobiernos: sacan o meten la cabeza en función de
las inquietudes del entorno.
Es verdad que la provocada crisis económica ha hecho daño en
las localidades de tendidos y gradas en las plazas de toros… pero, ni de lejos
es la única causa del preocupante descenso de espectáculos y espectadores
taurinos.
Siguen y siguen sin hacer autocrítica. Siguen ignorando al
reducido pero interesado y organizado movimiento antitaurino sin dar la cara y
el pecho con argumentos y razonamientos, que como mínimo el resto de la opinión
pública espera o cuestiona a las agresivas, importadas, totalitarias, fanáticas
y casi torturadoras actitudes y aptitudes antitaurinas. Siguen sin reconocer ni
rectificar sus negligencias. Siguen sin contar con los aficionados en general y
menos con los aficionados críticos… cuando se construye con y desde la crítica
verdadera… jamás se construye con el artificio del peloteo o del pelotazo.
Les interesa más el “gran” público ocasional y consumidor que
la cabal exigencia del respetable público experto y fiel. Lo peor, es que el
gran público veleta tampoco responde con suficiente continuidad y convicción ni
a sus llamadas, ni a sus ofertas ni a sus precios.
Llamadas sinceras y también engañosas porque el muy
minoritario grupito de ANOET acapara
tanto en tauromaquia que casi pueden hacer o deshacer a su medida y antojo… y
además heredan torpezas, vicios y tópicos fuera de tiempo y lugar.
El comunicado es destructivo, porque, en la forma, da la
impresión de que ni los taurinos más “potentes” creen y confían en lo que
hacen. Y si es así: ¿por qué no se van de donde están y dejan de incordiar,
explotar o especular con plazas que salen a subasta?
El comunicado es perverso, porque en el fondo están diciendo
a los imprescindibles que se juegan la vida en el ocio-negocio taurino que los
cortes y recortes siguen en vigor hasta que al grupito de ANOET les entre o
salga por el forro de sus apetencias. La intención del comunicado se parece a
las descabelladas barbaridades que pensaban y piensan las patronales de los
Diaz-Ferrán, Rosell o Arturito Fernández: abstractas, de juzgado guardia, contradictorias, contra natura,
contra corriente… contra todo lo que huela a ejemplo, compromiso ético y
justicia social, y para más burla, se lo solían o suelen llevar por varios
conductos echando muchas horas pero sin trabajar de verdad. Los de las
patronales tienen varios ingresos y negocios… los de ANOET apoderan a varias
“figuras”…
Las cosas y causas taurinas, desde las valoraciones
económicas, son poco más o menos como las de cualquier otro sector o gremio. En
efecto, son graves… y lo agrava más… el insaciable y letal capitalismo global
porque no cuenta ni entiende de capitalismos ínfimos o locales como es el de la
fiesta brava; y tampoco tiene ninguna consideración a las genuinas
connotaciones artesanales, artísticas, naturales, auténticas, profundas, históricas,
realistas, meritorias metafóricas y culturales que sí contiene la Tauromaquia.
El capitalismo, este capitalismo corrupto y follonero, está agotado y bloqueado
porque su inevitable guerra civil y sus guerras contra todo lo que mueva sin su
consentimiento son improductivas, agotadoras, insostenibles, carísimas y
permanentes. La inmensa mayoría del pueblo, en todos los pueblos terráqueos,
está hasta la montera de tejes manejes,
de privilegios, de conflictos y de miserias que solo benefician a las élites… o
a casi todas las élites para ser
exactos. Este capitalismo tiene más peligro que una corrida de Miura en Las
Ventas paraun aspirante a becerrista. Este capitalismo es canalla, inhumano y
soez aunque todavía quede algún majadero o pajarero que diga lo contrario.
¿Qué podemos y debemos hacer cuando un sector y un sistema
están moribundos o putrefactos?
-Cambiar, mejor hoy que mañana, directrices y mentalidades. Y
de abajo hacia arriba… para que las simientes, raíces y cimientos tengan
solidez, solvencia, solidaridad, credibilidad, horizonte y porvenir.
La labor ha de empezar en las guarderías públicas, mixtas,
privadas o familiares. De las primeras cosas que tienen que aprender los niños
es el Primer Mandamiento de la Ley Humana: Amarás, Respetarás y Practicarás la Justicia Social… por
encima de todas las cosas. A partir de ahí, el que tenga instinto y vocación
para ser torero, organizador, político, mayoral o mozo de espadas, que se comprometa
con los cánones sabios y eternos de su actividad y haya coherencia en sus
dichos y hechos. Compromiso y coherencia con principios, desarrollos y fines
elegantes, estilosos y a poder ser, con toque de distinción y capacidad de
sorpresa ante reses bravas-bravas… para que el todo del gremio del posible,
justo y nuevo sistema se venga arriba, se admire y se mantenga. Lo demás es
como el comunicado de ANOET o los comunicados del bipartidismo ultra
capitalista: más de lo mismo o peor. Ratificar sin rectificar es de cenutrios.
Así les va y nos va.
Y ya no tragamos tantas tramas, trampas y verdades a medias tan
ruinosas como caducadas. Somos legión los desertores globales de tantas estafas
locales y planetarias. En estos casos ser desertor… es un honor.
Como esto siga así
En desigualdad o frenesí
No le saldrán las cuentas
Ni a los discípulos de Botín
Ni a los seguidores de Isidorín
Ni a los herederos de Slim
Y como sigan haciendo regates
A tantísimos disparates
Llegará la ruina a los mismísimos Gates.