Nos informa el semanario Aplausos -a ustedes y a mí- que "Los motivos del descontento de los toreros con All Sports Media estriban en que, contrariamente a lo prometido por la empresa, ni ha aumentado la rentabilidad de sus derechos de imagen, ni, por otro lado, les han sido liquidadas algunas ferias televisadas pese a que el contrato obligaba a ASM a realizar los pagos independientemente de que ésta hubiera cobrado o no". Es decir, que el motivo por el cual el Cid y el Fandi, han abandonado este G-10 infame, y que Morante, Talavante y Manzanares se lo estén pensando en serio, no es ni más, ni menos, como decíamos hace un par de días, que el vil metal. No es la Fiesta, no es la defensa de la profesión en general, no es opinar que abaratando el espectáculo llegue a mayor cantidad de gente -recuerden a Joselito el Gallo y su afán por construir plazas monumentales donde cupiesen todos y se abarataran las localidades-, no es la pretensión de una mayor difusión de la fiesta a través de las televisiones, públicas, privadas, autonómicas, estatal o locales. No; es que no han recibido lo que pretendían y que no han aumentado sus honorarios, dicho en palabras del semanario citado, que no "ha aumentado la rentabilidad de sus derechos de imagen" y que además no les han liquidado lo pretendido. Es verdad que en un contrato mercantil estas cuestiones son fundamentales... pero y yo que creía que les movían otros intereses románticos (entiendan la ironía) como la defensa de la dignidad profesional, el sentimiento demagógico de que "la tierra es para el que la trabaja", que los toreros debían constituirse -como antaño hicieran los ganaderos- en empresarios... Pues no; detrás de todo, según nos confirma Aplausos, está el vil metal, ¡triste sino el de nuestros tiempos en que el honor y la dignidad han pasado, a no segundo, sino último plano!
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La
repercusión de la actuación de Enrique Ponce en la México, el pasado domingo,
no para de generar opiniones. Sin ir más lejos, la prensa especializada, la que
vive de la publicidad de los toreros en tan buena medida, reprueba la actitud
del público mexicano que abroncó al diestro de Chiva. Los medios “oficialistas”
españoles han salido en masa a defender
al espada que tan mal uso hizo de la misma en la Monumental del Distrito
Federal, pero las voces, quizá más veladas y sin la repercusión que los medios “oficialistas”
poseen, de aficionados y críticos locales siguen valorando muy negativamente en
general la actuación del matador valenciano. Ya les dijimos cuál era nuestra
opinión al respecto; adjuntamos –además- las fotos del lamentable encierro de
Xajay lidiado, donde se pueden “admirar” las poderosas culatas y el tremendo
trapío de los becerrotes lidiados en la primera plaza de América. Hace un par
de días el propio Ponce comparecía en televisión, en el programa que lleva Carlos
Loret de Mola, Primero Noticias, y daba su opinión sobre el escándalo,
mostrándose hipócritamente sorprendido por la reacción del público. El diestro llego
a decir que estaba estupefacto ante la protesta y comentó al periodista que había escogido este toro precisamente por su
peso y su trapío -ojo al dato que se le escapó “que había escogido por su peso y su trapío”- y que por desgracia,
no tuvo la embestida que se esperaba, pero que había hecho lo humanamente
posible para ello.
Les
adjunto el programa del festejo para que comprueben que, puestos a escoger,
dejó el segundo más pequeño y esmirriado de ellos para sobrero, por si se
propiciaba el “regalito”, habiéndole tocado también el menor de los lidiados,
en cuarto lugar. Por favor, no confundan peso con trapío, y vuelvan sobre las
fotos que les mostré días atrás. La polémica, por tanto, no se alimenta sobre
la base de los comentarios de los indignados aficionados o periodistas
mexicanos, sino sobre la defensa pírrica que –a mi juicio sin fundamento-
muestran los medios dedicados siempre a la loa de los más encumbrados en la
tauromaquia, aquellos que pueden permitirse gastarse sumas importantes en la
publicidad que mantiene a dichos medios y cuyo abrazo es siempre buscado por
algunos profesionales.
Vean,
si no, lo que siguen comentando fuentes aztecas libres de toda manipulación…
 |
| El pavoroso cuarto toro de la tarde, segundo de Ponce |
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La opinion de Jorge Salazar sobre la 1a. de la temporada en la plaza Mexico
Spínola y sus dudas, Diego y su entrega y la caricatura de Ponce en la inauguración de la Temporada grande en la más grande del mundo
30-10-2012
Jorge
Salazar
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Entre el cinismo, la hipocresía y la mentira
Por
Eduardo Rodriguez Diez.
30-10-2012
Son
preocupantes los comentarios de los titulares de los diferentes programas de
televisión taurinos que se transmiten en televisión abierta en base a lo
sucedido el domingo pasado.
Que
ninguno de ellos se haya atrevido a comentar la falta de trapío de por lo menos
cuatro de los siete toros lidiados del encierro de Xajay, aunque por ahí en las
entrevistas con el público después del festejo, cinco de cinco aficionados
coincidieron, mas aparte unas voces en el anonimato gritando al aire “que
bonita novillada” reprochando la presentación del ganado que se lidió en la
Monumental es para dar pena; peor aún, más indignantes y vergonzosas fueron las
declaraciones vertidas el día de hoy por la mañana en un noticiero que se
transmite a nivel nacional dichas por el torero español Enrique Ponce Martínez.
Con
todo respeto el que menos tiene que decirnos sobre las características del toro
mexicano es el torero valenciano; los aficionados mexicanos, conocemos de sobra
nuestro toro, sabemos y conocemos las características físicas del mismo así
como el posible comportamiento en comparación con el toro español. El cinismo
con el que usted habla del toro mexicano, Sr Ponce es de dar miedo, en la
ganadería brava mexicana, no solo existen ganaderías como Xajay, Teófilo Gómez,
Bernaldo de Quirós, ganaderías que los medios “especializados” se han cansado
de repetirnos que no son comerciales, aunque solamente les falte anunciarse en
un folleto del Wal-Mart; alaban que están llenas de bravura, así como le dan
eterna coba a otras que acostumbra usted exigir para poder cumplir con su
compromiso que creo usted firma en un contrato como MATADOR DE TOROS y que
lamentablemente han sido un ejemplo de escasa presencia, mansedumbre y aburrimiento.
 |
| El "tremendo sexto de la tarde", como los demás de Xajay |
En
la cabaña brava mexicana existen muchas ganaderías, Sr. Ponce, ganaderías con
verdaderos toros, hierros que anteponen verdaderamente la bravura y la
presencia con los que podría usted hacer lucir su toreo, toros con la edad y la
presencia sin ninguna mancha para que usted si así lo quisiera reivindicarse
con ese público que lo ha mantenido hasta el domingo pasado como un verdadero
ídolo, no solo ofreciéndole cariño, respeto y admiración, sino llenándole
también su espuerta con carretones de dinero.
Un
público Sr. Ponce que también como se pudo dar cuenta, cuando se cansa de lo
mismo, no le da pena ni vergüenza echar de su casa a patadas –o a cojinazos- a
un indeseable, sobre todo cuando siente robado en su propia casa.
Sr.
Ponce, si accede a la página WEB de la ANCTL (Asociación Nacional de
Criadores de Toros de Lidia) puede usted contar cerca de 277 ganaderías
afiliadas a esta Asociación en las que SEGURO encuentra dos astados con la
presencia digna de poder saltar a un ruedo como la México, todo es cuestión de
que USTED QUIERA HACERLO.
Ahora
que si lo prefiere y como asegura también, la caja del toro mexicano no tiene
capacidad para aceptar mas tamaño –que no kilos- pues hombre no hay que ser
hipócrita y decir también, que contamos en México con encastes españoles
que usted podría lidiar si ningún pretexto, encastes que además conoce y que
puede enfrentarlos dad su investidura de figura del toreo, sin tapujos,
ejemplos, Santa María de Xalpa, La Cardenilla, Barralva, etc. En nuestra fiesta
mexicana hay de todo como en botica, solo es cuestión de que el enfermo quiera
tomar el remedio.
Aquí
la cuestión es que no hay para donde hacerse, si usted contrata un visor y este
le empina -por no decirlo más fuerte-
a mandar al visor por donde se enhebran las agujas. Que si usted es muy amigo
del ganadero “X” a tomar por culo el ganadero “X”.
Entienda
de una vez que lo que está en juego es su DIGNIDAD como torero, su carrera, su
prestigio, su AMOR por EL TORO que es el que la ha dado todo lo que tiene.
Tiene
familia Sr. Ponce, ¿No le daría vergüenza que después de algunos años,
cómodamente sentado frente a la chimenea de su finca vieran el video de lo
sucedido el domingo pasado? ¿Cómo explicarles a ellos, a sus hijos lo que año
tras año, nos ha hecho usted a nosotros? ¿Cómo explicarle a un niño que se es
torero de profesión pero que no torea toros de verdad?
¿Es un dilema verdad? ¿Sabe cuántos padres de
familia nos encontramos con el mismo dilema el pasado domingo? ¿Cómo explicarle
a mi hija de 13 años que se empieza a fascinar por esta hermosa fiesta que el
que está en el ruedo que se dice torero no lo es? ¿O que la fiesta es un
fraude?
Aquí
diga usted lo que diga en cada medio al que se presente, el principal culpable
es usted, lo demás viene de sobra, el público se lo hizo ver y se lo hizo
sentir, el único que puede revertir esta situación lamentable, es usted y lo
sabe. Ahora lo más fácil serían tres cosas.
La
primera, que tomara usted un avión y que no vuelva nunca; la segunda, que siga
sin importarle un carajo lo sucedido y vuelva a hacer lo mismo; y la tercera,
que se faje lo que va debajo de los pantalones, que exija una corrida de toros
de verdad, que lo anuncie en todos los periódicos, en todos los medios, así de
la misma manera como le han dado un espacio en televisión para hablar y
lamentarse del trato que le dieron, que lleve consigo y que muestre el video de
lo que piensa usted lidiar o de lo que considera usted un toro digno; animales
escogidos por usted para así desenmascarar todas las dudas que pudieran existir
y darnos verdaderamente cuenta de lo que es la fiesta para usted.
Con
todo respeto Sr. Ponce, es de la única manera en la que yo pagaría de nuevo un
boleto para volverle a ver en una plaza de toros.
En
México Sr. Ponce, -por si no se lo explicaron- somos muy dados a crear ídolos
de barro. Estas figuras se olvidan con el tiempo, se borran con el paso del
mismo. ¿Quiere ser usted un ídolo de barro?
La
respuesta solo la puede dar usted, el cinismo, la hipocresía y la mentira sólo le
puede llevar al fracaso como el que le ocurrió el pasado domingo.
Un
abrazo y saludos para todos.
Porra México A.C.
Eduardo Rodríguez Diez
Presidente
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Dos historias, un mismo final: ¡La vergüenza!…. Artículo de opinión de Fernando Lahoz.
OCTUBRE - 30 - 2012
La México y la
Monumental de Aguascalientes…
Dos cosos,
supuestamente de primera…
En el papel,
los nombres en los carteles, llamaban poderosamente la atención…
Dos figuras
ultramarinas y cuatro jóvenes mexicanos, que vienen “arreando” fuerte…
Pero como no
todo puede ser color de rosa, ahi estaban los “teofilitos” y los “xajayitos”,
para dar al traste con las ilusiones de miles de aficionados…
Dos historias,
“agüitas” y la capital, con un mismo final… LA VERGÜEZA!!!
El sábado, la
gente de Aguascalientes, dió muestras de inconformidad, no asistiendo a la
Monumental…
Apenas y con
mucho esfuerzo, se pudo cubrir la mitad del aforo…
Y aunque el
cartel no tenía desperdicio, el hecho de ver anunciada a la ganaderia queretana
de la familia Gómez, ya presagiaba el fracaso….
La afición no
se equivocó…
Saltaron al
ruedo hidrocálido, seis astados impresentables para una plaza de primera, que
además y como ya es su costumbre, fueron mansos, débiles y que en lugar de dar
miedo, daban lástima…
Castella
desorejó(con complicidad de la autoridad) al primero de su lote, un “novillón”
facilote y soso, con el cual, literalmente jugó al toro…
Con el quinto
de la función, manso y soso, estuvo, simplemente porque tenia que estar….
Juan Pablo
Sánchez no ha sido el de otras tardes….
Quizá
contagiado por la sosería de su lote se puso a tono y soseó igualmente…
No se encontró
cómodo en ningún momento Juan Pablo durante toda la tarde… Solo el sabrá que le
pasó por la cabeza…
Y Arturo
Saldivar, que vió como le devolvían al impresentable astado que salió en cuarto
lugar, se entonó por momentos con el sobrero, el cual en cuanto se sintió
podido, se paró…
El cierra
plaza, mas geniudo que sus hermanos, no le dió la más minima opción…
Sin duda el
toro de la tarde ha sido el enviado por el Ing. Guadiana… Bien presentado y
bravo para el caballero en plaza y para los de a pie… Gamero es buen jinete,
pero tiene mucho camino por recorrer….
Y ayer, aun
con la resaca del petardo aguascalentense, nos disponíamos a ver otro
espectáculo vergonzoso….
Con Ponce en
el cartel uno ya imagina lo que saldrá por la puerta de toriles, aunque algunos
todavía creíamos en el buen criterio y profesionalismo de Javier Sordo…
Pero oh! decepción…
Nuevamente
vimos saltar a la arena, astados sin trapío y que encima mansearon y dieron al
traste con una corrida de máxima expectación…
Únicamente
Diego Silveti pudo salir a flote, más por estar arropado por el cariño de la
gente, que por su quehacer en el ruedo…
Cierto es que
ha estado en plan de arrebato y con firmeza, pero en muy pocos momentos se
templó…
Diego tiene
cualidades, sin duda, pero ojalá y no se de coba con tan poco, ya que sus
posibilidades van mucho más allá de lo que vimos ayer…
Y como ya lo
esperábamos, hubo show poncista…
No tuvo suerte
con su lote y tuvo la “ocurrencia” de regalar un astado con cara si, pero con
nulo remate, que provocó la ira de una afición cansada de las tropelías del
valenciano…
Bronca de
órdago, más que merecida…
Fermín
Spínola, ha tenido una tarde aciaga….
Dejó ir al
primero de su lote y ya mermado de facultades por la paliza recibida, pasó de
puntitas con el quinto de la función…
En fin, parece
que los “profesionales” del toro no entienden….
Corridas
impresentables, mansedumbre a raudales, aburrimiento en el tendido…
Un fin de
semana con dos historias y un mismo final: LA VERGÜENZA!
Que más nos
espera?
Fernando Lahoz
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Una opinión, dos efemérides y un comentario
Sierra de San Miguelito, S. L. P., a 31 de Octubre de 2012.
David Lomelí
31 de octubre
de 2012
(...)
Chivos para el torero de Chiva
El encierro de Xajay para la primera de la
temporada grande, ciertamente dejó mucho qué desear, bonito, bien hechecito,
comodito de cabeza, aunque en puntas. El 4º. fue muy castigado en el encuentro
con el acorazado, pero el resto pasó con el monopuyazo, a veces caricia, en que
se ha convertido el primer tercio, porque el toro mexicano, “el mejor del
mundo” en opinión del señor Locken, ya no aguanta más. ¿Se tendrá que llegar a
anunciar, como en las novilladas, “corrida sin picadores? ¡Y el de regalo!, un
auténtico chivo para Ponce, el Maestro de Chiva, ¡qué poca… presencia de
animal! (del torillo), por eso le arrojaron cojines al ruedo. Así están
correspondiendo las primeras figuras al público que va a verles a la plaza, aún
sin llenarla, desgraciadamente.
De lo positivo que vimos en la corrida
inaugural en la México ya se ocupan otros comentaristas. Es la segunda tomadura
de pelo a la afición por parte de las “fuerzas vivas” de la Fiesta Brava, la
primera fue la de Querétaro, hizo un mes. ¿Será “fuego amigo”? Cuidadito.
En la 1ª parte del post tengo que decir que lo que cuenta Aplausos es la versión de Moeckel. Y no es precisamente como lo cuentan. Ya contaremos la realidad.
ResponderEliminarPero me parece demagógico el cómo se cuenta. Vamos a ver, en el asunto de la TV se genera un contrato multimillonario. Y lo generan, principalmente los toreros (las figuras) y es lógico que peleen por lo que consideran justo. Es decir, que si el dinero se lo lleva Canorea o Choperita, o la Comunidad de Madrid o la Real Maestranza como propiedades de Sevilla y Madrid, a nadie le importa. Ahora, si los toreros buscan un mejor reparto del dinero para todos, entonces, es que son unos malvados. Basta ya de tanta demagogia.Un saludo.
Permítame mostrarme en desacuerdo. Los toreros son una sola parte del espectáculo, precisamente la más cara -los que más cobran- si se trata de los del G-10 precisamente y algún otro. Sin embargo, los ganaderos no sacan nada importante -económicamente hablando- de las retransmisiones a pesar de ser los que ponen la materia prima. Las empresas, ahogadas por los honorarios de algunos toreros, tienen que recurrir a los ingresos de TV porque si no no podrían dar determinados carteles, y eso a costa de reducir la calidad en otros del mismo ciclo (con que hacer frente a las posibles pérdidas de algunos). No está de más que los toreros reclamen lo suyo, como en su día hicieron José Tomás y Joselito, y cuando se rajaron algunos de los del actual G-10... pero evidentemente con lo que está cayéndole a la fiesta he dicho y mantengo que no es el momento oportuno, ni muchísimo menos. Todo, por tanto, es cuestión mercantil; porque si fuera romántico podrían haber creado un fondo de reserva para compañeros heridos o incapacitados en la fiesta, como en su momento hicieron tantísimos espadas con el famoso Montepío y Sanatorio de Toreros. Eso sí que hubiera sido un gesto. Si, por otro lado, le parece bien que alguno -como se postuló en un principio- cobrara aunque no torease... ¿porque no repartieron aquellos honorarios entre el resto del escalafón, o al menos entre los que también se enfrentaban como los del G-10 a otras corridas en esa misma feria? No soy envidioso, ni nunca lo he sido, allá cada cual con lo que gane, y cuanto más mejor, lo que me preocupa es la justicia distributiva, por un lado, y el futuro de la fiesta por otro, agobiado por el lobby del G-10 y sus -hasta el presente- jamás igualados emolumentos. Ya lo he publicado más veces en este blog (Lo que pesan las figuras). No obstante muchas gracias por su comentario y espero que nos aclare cuanto antes el trasfondo de la cuestión y lo que opina Joaquín Moeckel.
ResponderEliminarHay cuestiones que se repiten una y otra vez, y no es verdad. Éso de que las empresas están ahogadas por los "malditos" honorarios de los toreros, no se las cree nadie. Por lo menos, cuando hablamos de las grandes empresas. Hay una plaza, dónde las cuentas son públicas, que es Bilbao y éste año han tenido un Beneficio de 600.000 € en una semana (100 millones de pesetas). Y por allí, han pasado todas las figuras.
ResponderEliminarLe explico la historia complenta. El G10 se pone en contacto con una agencia que es ASM, porque quiere cambiar el sistema de TV con tres puntos:
1) Que el dinero que ofrece la TV en un 50% sea para los toreros. Ojo, para todos los toreros. Tanto es así, que hay una asamblea en Madrid con los toreros modestos y se les asegura unos mínimos de 6000 € por corrida televisada. (Ahora apenas cobran derechos de TV). Es decir, que los principales beneficiados iban a ser los modestos.
Los modestos empiezan a recibir las presiones de las empresas, y solo César Jimenez se queda.
2) Quieren participar en las negociaciones con empresa-Digital+. Es decir, no quieren la imposición de la TV. Quieren TV, pero quierer participar y que se hable con ellos, primero.
3)Que haya una separación clara entre el dinero de la TV y el dinero de torear. ¿Sabe usted por qué?.Mire usted, porque a Sevilla llega cerca de 2 millones de € para que reparta Canorea, y lo primero que hace la Real Maestranza es retirar el !! 25 % PARA ELLOS !!. ¿A usted le parece normal?.
Escribir aquí de romanticismo todo ésto es muy fácil. Pero el dinero que no va a Juli o a Morante, se lo queda Canorea, Chopera o Choperita o las propiedades. !! Qué romanticismo !!.
Las peticiones de los toreros eran todas muy justas. El problema es que muchos son muy valientes en la plaza, pero luego muy corbardes en los despachos. Y cómo siga éste sistema de TV, cuando pase 5-6-10 años volverá a explotar.
El tema de ASM y el por qué se van los toreros, se lo explico otro día.
Estimado amigo:
ResponderEliminarPor delante, y antes que nada, permítame expresarle que subscribo muy buena parte de su opinión, como es lógico; ya sé que las grandes empresas obtienen beneficios, como es lógico –si no se retirarían del negocio, claro-, y que a veces éstos son desproporcionados a su esfuerzo o inversión. Porque también hay otra cuestión que debemos considerar y es que son empresas, personas o grupos que exponen su dinero y/o trabajo y que también tienen derecho a beneficio igualmente lícito. Pero también sé, seguro que como usted, que en los últimos años (sobre todo a raíz de 2008) esos beneficios se obtienen a base de ofrecer peores espectáculos. No es que por Bilbao pasen las figuras –habría que ver quién lo es de verdad-, sino que el aficionado lo que quiere es ver carteles redondos en determinadas ferias y eso es tantas veces tan caro que cada día se pueden ver menos, o cuando se ven es apenas en un par de tardes, a base de rellenar la feria con otras mediocridades o peor aun. Claro es que como aficionado, asiduo en Madrid, me interesan muchas tardes por algún detalle, ganado o torero concreto, pero yo quisiera ver los carteles de mi infancia en la feria de San Isidro o en la corrida de Liberación bilbaína. Y vayamos también por partes.
En primer lugar que Bilbao tenga beneficios no significa que sean los mismos que pasados años… y que el resto de las plazas los tengan. Si los tienen, obviamente, como digo, es a base de contratar sólo a espadas de más arriba en una única o a lo más dos corridas y abaratando los carteles en esa y otras funciones, a base de meter en ellos a espadas que tengan menores honorarios. Yo lo que deseo, como aficionado, que es lo único que me mueve, es ver a los tres mejores enfrentados en un mismo festejo en una feria de postín, día tras día. Y que si son tres de los de abajo me disminuyan el precio de la localidad a la mitad. No creo que tenga necesidad de recordarle los carteles madrileños de los años sesenta o anteriores, se los sabrá de memoria, pero Antonio Ordóñez, Bienvenida, Paco Camino, Aparicio, El Viti o Diego Puerta, Antoñete, Ostos o el que fuera estaban presentes dos, tres o cuatro tardes cada cual (siempre hubo bajas y problemas de contratación con alguno). Hoy eso es imposible. En Madrid, el Juli (lo dijo Roberto Domínguez) cobra 180.000 euros por un festejo, sume unos honorarios parecidos de Morante y Manzanares (eso es un buen cartel), añada la ganadería preparadita al efecto, sume gastos generales y pagos al resto de los servicios de la plaza, el canon que corresponde por festejo al propietario del coso y verá como no salen las cuentas; Madrid factura por taquilla cerca de 90 de los antiguos millones de pesetas (unos 540.000 euros).
En segundo lugar, lo que paga el canal Digital Plus por corrida dista mucho del cálculo ofrecido; según alguno de sus responsables o lo que alguna empresa nos ha comentado, antes era algo superior y ahora está en unos 90.000 euros por festejo –por favor, corríjame si me equivoco-, con lo que las cuentas siguen sin salir. ¿Sabe si este año han pagado ya a la empresa madrileña?, porque el pasado año cuando se adjudicó la plaza a Taurodelta y adláteres, Digital Plus no había hecho aun efectivo el pago (y la empresa andaba también atrasada con la Comunidad, algo que por cierto hubiera anulado el concurso…) y sólo había presentado al efecto un pagaré. Ni defiendo a la TV de pago, ni a la empresa madrileña, como ve. (sigue)
(Continúa)
ResponderEliminarTercero, si los emolumentos de los diestros han llegado a ser tan altos como los que ahora se barajan para los de más arriba (el 90% de los matadores no llegan, a veces, ni al mínimo establecido por convenio, seamos sinceros), es, precisamente, porque detrás estaba la TV para redondear los mismos. Lo que pasa es que asumidos los cuales, los matadores con cierto poder mediático, han decidido que esos eran los suyos naturales y que ahora quieren más (no ahora, entiéndame, sino desde algún tiempo). E igual que me parece inmoral lo que cobra un futbolista de lujo –no digo que no sea lícito, ojo-, casi otro tanto me parece ocurre con este aspecto. Por mucho que se jueguen la vida en 40 minutos una tarde, también lo hacen multitud de otras profesiones –muchas de ellas servicios públicos a la sociedad- a diario y por cantidades infinitamente inferiores. No es muy moral que quien protege a los ciudadanos, escolta cargos públicos o personas amenazadas, apaga sus incendios, cura sus enfermedades, etc., cuestiones absolutamente necesarias, imprescindibles, tenga unos ingresos anuales que ni se acercan, muy de lejos, al de futbolista en cuestión. Los toreros de más arriba han asumido que por su trabajo en 40 minutos, en una tarde, la remuneración sea muy superior, perfecto. Pero quieren más porque ya han asumido que eso es lo normal, cuando en realidad lo fue porque las empresas de determinadas plazas ya contaban con unos ingresos extra de TV para hacer frente al gasto.
Cuarto, no defiendo a las empresas en general –yo creo que ni en particular-, basta con repasar mi trayectoria, pero si queremos que la fiesta se mantenga, y lo haga con los mejores espectáculos posibles, necesitamos armonizar ingresos y gastos, y hoy por hoy, lo más costoso de una corrida son los emolumentos de los espadas de más arriba, nos guste más o menos. Los ganaderos, la mayor parte de ellos, no recibe ni siquiera lo mismo que podían percibir por una corrida hace diez años. Se han vendido corridas de toros este año por 6000 euros, hay ganaderos que están deseando que alguien les mate toros en el campo por 600 o 500 euros… o menos. Sí, es verdad…, sólo algunos de los más famosos puede que lo hagan, que cobren ahora más que entonces, pero dudo mucho que sea general. Ni siquiera Victorino Martín lo hace… El espectáculo, la corrida de toros, es un festejo o espectáculo público de pago, que nace como un negocio, y de ahí el desarrollo de plazas cerradas para buscar los ingresos que generan los que entran en la misma (ahí el libro de Shubert es altamente clarificador). Eso les diferenció siempre de capeas o toros populares. Asumamos, por tanto, que también el empresario –de una u otra forma- es necesario, y que tampoco hay que rasgarse las vestiduras porque al arriesgar su dinero busquen beneficios, aunque a mí no me importe –e incluso defienda- que también moderen sus ingresos si es a base de pagar mejor a todos los demás (personal auxiliar de todo tipo, ganaderos y diestros más modestos) o porque disminuyan el precio de las localidades. (Sigue)
(Continúa)
ResponderEliminarYo como espectador que he pagado siempre mi localidad en Madrid (religiosamente compro mi abono desde hace más de 30 años y las entradas sueltas de cuantos espectáculos contemplo, con una única excepción, un día que me invitaron al Palco del Ayuntamiento en los años 80) lo que quiero es que me reduzcan el precio de la entrada y me ofrezcan mejores carteles. Debo ser tonto… Entiéndame que eso no es demagogia, sino sentido común, y que si para eso hay que reducir costes, busquemos de dónde pueden reducirse más fácilmente... empresas o diestros de más arriba. En un festejo de lujo –que es lo que yo quiero ver en Las Ventas- no es posible; la corrida de Beneficencia –o lo que ha quedado de ella y de su espíritu- suele ser altamente deficitaria para la Comunidad de Madrid. Pero deficitaria de millones de pesetas, a veces bastantes… La mayor parte de la temporada (aunque aquí entran en juego los malísimos carteles de la misma) también…
Quinto. Con la crisis que nos acecha a todos, o al menos a la mayor parte de la sociedad, ¿era necesaria esa toma de postura indecente a principios de temporada? ¿No se podría haber llevado de otra manera? ¿De qué ha servido aquello? ¿Ha habido más, o menos, espectadores este año por la crisis y el empeoro de carteles? ¿Han sido mejores o peores las ferias en su conjunto, las televisadas, las principales, y no hablo de resultados artísticos? Cuando hay un millón y medio de familias ya sin ingresos, cuando Caritas llena día a día sus comedores, cuando ocho millones de personas en España andan rozando o ya superado el umbral de la pobreza (que no es el mismo que en otros países, lógico) ¿no le parece obsceno el espectáculo? ¿No se debería haber pospuesto? ¿No hubiera sido mejor llevar la negociación en conjunto, a través de las asociaciones, y no por un club supuestamente elitista? ¿No hubiera sido mejor, como gesto, negociarlo y ceder la totalidad de los honorarios, dado el nivel de ingresos de los del G-10 y aunque fuera de forma temporal, a obras sociales sin necesidad de salirnos, si quiere, del mundo del toro? (Sigue)
Sexto. ¿Por qué alguno de los del G-10 se rajó de la iniciativa que en tiempos de mayor bonanza propusieron Joselito y José Tomás, cuyas pretensiones iban en el mismo sentido y que todos comprendimos entonces? Y en el fondo de todo, ¿no sigo teniendo razón y que todo, en definitiva, gira en torno al reparto del vil metal? Una cosa es tener cubiertas y aseguradas las necesidades vitales (la mayor parte de los españolitos de a pie nos jubilamos, por cierto, a los 65-67 y tras haber cotizado, mes a mes y sin falta alguna, 35 años como mínimo para poder optar a una pensión sea cual fuere su importe, mientras que los diestros, y bienvenido sea, no necesitan, ni mucho menos esos plazos o edades; compare con un escolta en el País Vasco, por ejemplo, en los años de plomo) y unas ciertas –cuantas más, mejor- comodidades y otra esta cuestión que nos ocupa. Hay que tener también clara nuestra responsabilidad social, al menos para con los que ocupan una profesión como la suya. (Sigue)
(Continúa)
ResponderEliminarSi en vez de preocuparnos por estos motivos –siempre desagradables cuando tocan cosas de dineros, aunque necesarios- nos alegráramos de gestos como los de José Tomás, cediendo sus ingresos a obras sociales, o Morante de la Puebla, ofreciéndose a torear gratis, mucho mejor le iría a la fiesta, porque siempre ha sido y seguro que lo seguirá siendo, enormemente solidaria. Cuantas veces han toreado gratis por motivos benéficos, y cuántas veces les hemos alabado el gesto; eso es lo que hace falta y no andar arañando unos ingresos extras de los que el G-10 puede perfectamente prescindir. No es que no sea lícito, ojo, es que el espectáculo resulta bochornoso. Siéntense en conjunto con los empresarios y negocien la cuestión, en conjunto también.
Entenderá que, como historiador, me interesen también los aspectos pretéritos referidos a lo que ganaban o dejaban de hacerlo los diestros de antaño. Sí le puedo asegurar, y lo he plasmado en algún escrito, que jamás de los jamases los de más arriba han ganado tanto como ahora, ni en términos absolutos, ni proporcionalmente a lo recaudado en taquilla. Pepe Hillo o Pedro Romero ganaron hasta 2000 reales por festejo en Madrid, estoqueando cinco o seis toros por corrida (no haga cuentas con otros contratos, que implicaban costosísimos desplazamientos, y honorarios de toda la cuadrilla, gastos de estancia y mantenimiento en los dos, tres o cuatro días de contrata en otras plazas) cuando un oficial de cualquier gremio solía ganar unos 10-20 reales diarios (multiplique por unos 300 días hábiles o poco menos y jornadas de mayor número de horas). Montes, con sus 4000 reales por tarde (en la que mataba dos o tres toros) ganaba el doble que un empleado de bajo nivel anualmente, por ejemplo, el portero del Banco de Isabel II, que percibía 2000 reales al año. Lagartijo y Frascuelo, en Madrid, en documento notarial que poseo de ambos, ganaron en 1871 y 72 unos 8000 reales por corrida, y en 1888 ya eran 22.500 reales, cuando un profesor universitario ganaba entre 20.000 y 40.000 reales anuales. Y así podríamos seguir... El Juli ha llegado a cobrar 180.000 euros por un festejo en Madrid en 2011 (por el otro “sólo” le dieron 150.000), compárelo con los 42.000 euros anuales de un médico, un profesor universitario, los 30.000 de un policía nacional o los 14.000 de tanto mil eurista como hay, y eso que aun los hay que no llegan a tanto. Y si los cobran, y para mí perfecto pero que no pidan aun más, ¿no cree que es porque hay TV por medio? ¿No cree que, no el hecho en sí mismo, sino la oportunidad de aquello y el que se formase el G-10 para ello es un espectáculo poco edificante en los tiempos que corren? No discuto el trasfondo, repito, sino la oportunidad, la exclusividad y las maneras de ello. Quiero, además, que me cueste menos el abono y me den mejores espectáculos, incluidos los espadas del G-10, a muchos de los cuales quiero ver (no a todos, no se asuste). Esa es la cuestión. El mercadeo, sobre todo cuando se está a determinado nivel, me parece –y ya lo he dicho- obsceno. Que Fernando Cruz, Robleño, Alberto Aguilar, Urdiales, Moreno o tanto otro intenten mejorar su situación es perfectamente entendible y subscribible. Pero los del G-10… ¡caramba!