miércoles, 22 de agosto de 2012

Presentación de "Joselito en Bilbao. La culminación del mérito"


Este pasado martes, y en las Tertulias del Club Cocherito de Bilbao que se celebran en el Hotel Carlton, tuve el privilegio de presentar el libro “Joselito en Bilbao. La culminación del mérito” del que soy humilde autor. El libro tuvo una buena acogida, y al finalizar el mismo un nutrido grupo de aficionados se interesó por el mismo.


Nadie duda que José Gómez Ortega –Joselito es una de las grandes figuras de la tauromaquia de todos los tiempos. Su rivalidad con Juan Belmonte trascendió más allá de los ruedos, llenando buena parte de la vida nacional. Joselito ha sido considerado como uno de los toreros más largos y completos de la historia. José junto a Juan Belmonte puede considerarse el verdadero revolucionario del arte de la tauromaquia, complementándose ambos en la creación del toreo moderno. Fue precisamente en Bilbao donde José alcanzó varios de sus logros más importantes; en aquella plaza de Vista Alegre donde, a la vez que se enfrentaba a corridas consideradas como las más duras y encastadas del panorama bravo español, triunfó sin precedentes ante una afición seria y exigente.
José sufrió su bautismo de sangre, aun como novillero, en el coso de Vista Alegre bilbaíno el 1 de septiembre de 1912, apenas unos días antes de tomar la alternativa en Sevilla, y en la misma plaza de la capital de Vizcaya sufriría otro de sus percances mayores, la cogida que por un toro de Murube sufrió el 19 de agosto de 1914, que le afectó al pectoral y axila izquierda.


Pero al margen de estas páginas tristes, José consiguió triunfos sonadísimos en Bilbao, las Semanas Grandes a las que acudió le deportaron grandes satisfacciones, fama y prestigio como pocos, demostrando lo que siempre debería ser una figura de la tauromaquia.  
Se enfrentó en dicha plaza a vacadas del prestigio de Miura o Pablo Romero, de las más duras de su época, pero también a toros del Conde de Santa Coloma, Parladé (o Gamero Cívico, desde 1915, una vez vendida la ganadería) o Murube (o Carmen de Federico de Urquijo, cuando en 1917 vende también la vacada). Fuera de lo que es la Semana Grande toreó reses de Martínez, del ganadero onubense José Carvajal (que acabaría en manos del marqués de Villamarta en 1919), marqués de Tamarón (luego Conde de la Corte), de la Viuda de Felipe Salas, del marqués de Guadalest, de Juan Contreras o de los hermanos Antonio y Alipio Pérez Tabernero antes de la incorporación de ganado de Santa Coloma. Una amplia panoplia de ganaderías y encastes, como era típico en su época. Jamás puso veto a ganadería alguna, aunque siempre, como es lógico, tuvo sus preferencias. Por eso cuando tuvo que actuar como único espada, mató –como en Madrid y con idéntico éxito- siete toros de Martínez…

Ganaderías y toros lidiados por Joselito en Bilbao


Quizá uno de los episodios más significativos de toda su epopeya bilbaína fue la negativa a torear en la Semana Grande de 1915, debido a que impuso como condición la de alternar todas las tardes con Juan Belmonte y que quería la corrida de Miura con él, quizá para demostrar que estaba incluso por encima del Pasmo de Triana. No pudo ser, el contrato con Belmonte ya estaba cerrado con el apoderado de éste (Juan Manuel Rodríguez, que lo era también de Cocherito de Bilbao) y en él no figuraban los famosos miureños. La Junta Administrativa no consiguió hacerle deponer su actitud, ni convencer a su apoderado (Manuel Pineda) para que les ayudase a modificar la opinión de Gallito. Éste, por tanto, dejó de acudir ese año a la plaza bilbaína, al no ver satisfechas sus aspiraciones de enfrentarse al mejor diestro del momento, con la corrida más dura, y en plaza de la importancia y trascendencia de la de Vista Alegre bilbaína. Eso son gestos y diestros. Conocemos, asimismo, lo que pudo ganar en cada uno de los festejos en los que intervino, con total precisión, sin aproximaciones ni figuraciones; es la cifra exacta y concreta que cobró por cada tarde. Merced al dato, sabemos que una terna de primerísima línea sólo llegaba a alcanzar aproximadamente un tercio de lo que se recaudaba por taquilla en cualquier festejo, y que a las ganaderías se le pagaba por sus toros más de lo que recibía cualquiera de los ases de espadas, algo que se ha truncado para siempre en la tauromaquia contemporánea, en la que el toro ha perdido importancia.
Joselito toreando un Santa Coloma en la primera corrida de 1916 en Bilbao
Estos y muchos otros episodios se van acumulando en el libro merced a la incorporación de centenares de datos de primerísima mano, sacados de los propios libros de Actas o de Cuentas de la plaza vizcaína. Son, de este modo, inapelables, no fruto de leyenda, sino de documentos auténticos. Con ellos se conforma una historia muy especial, interesante y trascendente del paso de una de las máximas figuras de la historia por el coso de Bilbao.
Y mucho más; en las 210 páginas del libro, y basándome en documentación de primera mano, libros de actas y de cuentas de la plaza bilbaína, revistas y periódicos de la época, se desgranan cuáles fueron los principales hitos y el pormenor del éxito de Joselito en aquel coso; lo que le hizo llegar al culmen de la torería de todos los tiempos.

3 comentarios:

  1. Don Rafael: Es curioso ver cómo la vuelta de un siglo transforma los valores de los personajes de la Fiesta. De lo que he leído, salvo lo de Benjumea, que Joselito se propuso exterminar, no había toros "ilidiables" para él. Y la prueba está en el hecho que nos narra en su ausencia de las Corridas Generales de 1915, cuando exigía la de Miura para dejar en claro su poderío y al no tenerla disponible, prefirió no acudir.

    Cien años después, desaparecen encastes, otros quedan relegados a "especialistas" y la mayoría de los "importantes" enfrentan un toro uniforme en su presencia y comportamiento, lo que en el tiempo de Gallito era exactamente a la inversa.

    Enhorabuena por la publicación de la obra y por la remembranza, que si bien no implica lo mejor del tiempo ido, sí nos deja ver que las cosas eran de otra manera.

    Saludos desde Aguascalientes, México.

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  2. Excelente trabajo que espero tener pronto entre mis manos. Y como un oasis su intervención en la tertulia del Cochero, entre tanto jabón se agradece la sinceridad del aficionado.

    Un saludo cordial.

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  3. D. Rafael:
    Soy un aficionado de Sevilla, no tengo el gusto de conocerle. Me gustaría poder contactar con usted, pero no encuentro cómo hacerlo, ¿le importaría enviarme un correo a mi dirección? Es para algo relacionado con Joselito. Muchas gracias.
    antoniopinedavaldecantos@hotmail.com

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