sábado, 26 de enero de 2013

Mentirosos


“Antes se coge a un mentiroso que a un cojo”, dice el refrán popular.  Y ahí andamos. Superada la intestina guerra entre Ayuntamiento y Comunidad de Madrid por la boina de Las Ventas, tras la actitud de la Comunidad por el desastre del Madrid-Arena y la firma de Botella contra las medidas económico-sanitarias de la Comunidad, el tapa calvas de José Antonio Martínez Uranga luce ya en toda en su extensión y circunferencia sobre la antaño llamada plaza de toros de Madrid, mañana quizá Polideportivo Las Ventas.
Ya tenemos un coliseo más. Uno de esos que, como en el caso de La Coruña, San Sebastián o más próximamente  Vista Alegre, sólo sirven para otras cosas que no sean los toros, o para apenas unos tristes festejos cubiertos y sin público (caso de la Bella Easo, entiéndanme). 

Ejemplo de cómo quedaría la cubierta
Y ahora, el inefable Choperita, que nos prometió su retirada –como también hizo, véanlo, el presidente de la Comunidad, Ignacio González- para el inicio de la temporada taurina, se descuelga ante Rosario Pérez, en ABC, diciendo que su intención es mantener la cubierta –si la Comunidad se lo permite- hasta mayo. ¡Hasta mayo! No sólo el inicio de temporada, sino también los festejos de abril… y hasta mayo. Cabría preguntarse hasta qué mayo habla…
Ignacio González, al que desde la tribuna periodística madrileña se alaba sin mesura –si es tan gran aficionado, ¿cuándo va a los toros?, si no es algún día de postín y de refilón-, ya dijo, en el inicio de la instalación de la boina, que la misma se retiraría para el comienzo de la temporada… pero ¡ca!, ahora se nos va allanando el terreno para cambiar de idea, postura u opinión. Siembra que algo queda. Se ha abierto, también, una encuesta, ¡madre de Dios!, en el mismo diario, para apoyar con ese referéndum a la cubana el mantenimiento de la boina madrileña… y como es lógico gana el “sí quiero”, que para eso se ha hecho y vota el que quiere y cuantas veces quiera. Seguro que entre los opinantes están el 100% de los turistas que acuden a la soberbia programación Taurodeltiana de extra ferias (tampoco la de ferias es mejor, pero cuenta con el abono semi-cautivo de varios millares de incautos, como el que subscribe), y están también el 100% de los aficionados de “todos los domingos y fiestas de guardar”. ¡A que no! Pues claro que no. La campaña de propaganda a favor del gorro invernal, se amplía a la primavera madrileña, todo en un afán recaudatorio que no consigue la empresa que peor ha gestionado y gestiona el espectáculo taurino en Las Ventas de TODA LA HISTORIA. Ya arrendaron una plaza cubierta en Madrid, Vista Alegre, ¿se acuerdan?, y ¿qué programación taurina ofrecieron en ella en esos años?

Cuando se comenzó su colocación, antes de la guerra Ayuntamiento-Comunidad... ¿cumplirá ahora la legislación sobre recintos para espectáculos públicos cubiertos...?
Ahora nos anuncian la boinificación de Las ventas, para rentabilizarla con otro espectáculos ajenos al fin que la vio nacer y que la ha mantenido activa durante… ¡¡¡81 años, nada menos!!! Ochenta y un años sin que haya necesitado ser cubierta para que en ella se hayan logrado las más altas cimas artísticas en el arte de Cúchares, o se hayan celebrado infinidad de otros festejos, espectáculos, mítines políticos, conciertos, verbenas o bailes. Pero la pésima gestión choperitil sólo puede sostenerse, al parecer, si logran ese contrato con Warner Music para rentabilizar el coso. ¡Qué se lo digan a su primo, Manolo Chopera, que en gloria esté! Increíble pero cierto. Ese Manolo Chopera, Manuel Martínez Flamarique, que logró llenar la plaza en innumerables ocasiones, incluso en verano, que aumentó al doble el número de abonados de la plaza, de los que han vivido los chupópteros actuales… Y todo ello, repetimos, cuando andan circulando pagarés sin cuento para pagar con la venta de los abonos del próximo San Isidro 2013, a toreros o ganaderos de 2012. Y la Comunidad, que preside don Ignacio González, velando por el buen uso de un espacio público de todos los madrileños –la plaza pertenece a la Comunidad y no a él, ni mucho menos a Taurodelta- permitiendo un desembolso de cuatro millones de euros cuando todavía no se han pagado los gastos de la temporada anterior… ¿Hay quién lo entienda?
Todo son alabanzas en el artículo a la gestión de Taurodelta... ¿pero han reparado lo que nos ha ofrecido en los últimos años? Pues no, para qué, como se decía en mis días juveniles, cómo se nota quién va gratis a los toros...
Se nos anuncian, en el “publi-reportaje”, grandes mejoras a los aficionados… A partir de ahora, prometen los toreros que siempre van a torear con más ética y verdad, con arte y gusto exquisitos, más templados que nunca y con mayor estética, y los ganaderos nos auguran mayores dosis de bravura, toreabilidad o casta… ¿Se puede ser más simple, más mentecato…? Y la empresa nos asegura mayores dosis de “comodidad” (¡¡!!). Es decir que, por estar a cubierto, los asientos se van a reblandecer y mullir, el respaldo va a hacer acto milagroso de aparición, el espacio y la distancia entre localidades a aumentar y el sitio para descansar las piernas a prolongarse “hasta el infinito y más allá”… Hombre, sí, es verdad, no se mojarán los que antes se mojaban... si es que llueve durante el festejo, quizá haga menos viento, si es que Eolo sopla… pero, ¡ojo!, con ello la empresa no tendrá excusa para suspender como ya hizo la temporada pasada a pesar de que nada caía al inicio de la corrida… Muy bien, señor González por mantener a la empresa en activo…, enhorabuena.

Ejemplo de toro de Las Ramblas que la empresa nos ha "regalado" este año (Foto: lasventas.com)
Para el “bastión de Taurodelta”, como se le llama en ABC, «La comodidad será mucho mayor, con calefacción y tapados, en unas fechas en las que lo normal es que haga mal tiempo». Para Uranga, metido a temprano meteorólogo, la comodidad sólo consiste en estar con calefacción y “tapados” –como en el cuplé-… se ve que con la edad va echando de menos las pantuflas, la bata y la mantita con que ver la TV… de Molés… Oiga, ¿y si hace calor en esas fechas…, qué hacemos? Al parecer, y con enorme clarividencia para con el negocio taurómaco, para José Antonio Martínez Uranga, el secreto de que la gente vaya a los toros radica en lo siguiente: “Para captar espectadores es primordial que se sientan cómodos en una época en la que existe una amplia oferta de espectáculos”. ¡Ostras Pedrín!, no que los carteles sean mejores, más interesantes, o que se haga más publicidad, o que se convoque a más gente ofreciendo mayores emociones, o que se regalen entradas o se baje su precio, no, la cuestión radica en que el que vaya a ver a Pelé y Melé ante novillos de la ganadería de “Sangremustia”, se “sientan más cómodos”; ¡ojo, de nuevo!, “SE SIENTAN MÁS CÓMODOS”, no que lo estén… Sobre todo porque “existe una amplia oferta de espectáculos”… lo que hay que leer por ahí: es decir, que la gente, como han techado la plaza, preferirá su pétrea e incómoda localidad de granito u hormigón a la mullida butaca del cine donde proyectan Lincoln, El Hobbit o la última entrega de los vampiros adolescentes. ¡Atención, ese es el gestor de Las Ventas!
Por cierto, ¿qué pasa con la iluminación en caso de que el festejo se alargue?, porque los focos están por encima de la cubierta… ¿Habrán previsto ponerlos en el anillo central y tendrán la suficiente intensidad o estaremos en semi-penumbra? ¿Costará lo mismo un tendido de sol o, aprovechando la cuestión, pondrán el famoso cartel de “oi no ai sol” y todos a pagar como en la sombra? ¿Qué harán si la temperatura aumenta y el bochorno interno se hace insoportable, como sucede en tantos cosos cubiertos… que al menos tienen el techo practicable o corredizo? ¿Pondrán más calefacción…? ¿Y qué ocurre si los olores a fritanga (debajo del nueve y en la sala VIP) o a heces de vacuno resultan insufribles… eso aumentará la comodidad del público?
Otra cuestión es la del público abonado… al “gallinero”, palabra de la audaz reportera de ABC. Al parecer, por cierto, ese gallinero sólo tiene como público abonado a mayores de 65 años o jóvenes  no sé si semi-imberbes. ¿Dónde quedamos los demás, abonados en gradas o andanadas? ¿En el limbo de los justos, suprimido ya oficialmente por la jerarquía? Hay algunos que como sólo van de regalo a localidades bajas se ve que no han reparado en la existencia de una humanidad doliente… Solución “choperitil”: «Los 2.200 abonados de la tercera edad bajarán al tendido sin sobrecoste alguno. También los menores de 25 años», explica Martínez Uranga. Y los demás… qué. Pues no lo sabemos, esperemos entrar en cualquiera de los dos colectivos y hacernos con ello merecedores de igual benéfico y filantrópico trato, porque TENEMOS DERECHO, RECONOCIDO POR LEY, A QUE SE RESPETE EL ABONO, LA COMPRA PREFERENCIAL DE LA ENTRADA, EL PRECIO DE LA MISMA, TODA LA TEMPORADA. O, es que acaso habrán de obligarme a gastar más en un tendido alto o bajo, cuando yo quiero pagar mi grada o andanada -sacando mi entrada con la anticipación correspondiente-. El precio medio en Madrid se incrementará una barbaridad, y aquello de que era barato ir a los toros en Madrid pasará a los libros de historia. Nada de ir por cinco euros a los toros; a partir de ahora la entrada más barata del coso será un tendido alto de sol -fila 27, más arriba que en muchas plazas de toros- por 10,70 euros (más del doble, precios de 2012, SIN LA SUBIDA PARA ESTE AÑO). Vayan pensando… con ello la empresa pretende que todo lo que se recauda en andanadas y gradas pase ahora a ser recaudación con precios de tendido, lo que ni siquiera está bien para el turista ocasional, ¡oiga!

Otra fiera de 2012, Dudosillo, de Valdefresno (Foto: lasventas.com)
Así que, usted, modesto aficionado con sueldo de funcionario a la baja, mil eurista escaso, parado o sufrido autómono víctima de la crisis, podrá disfrutar de los toros un domingo de abril… a mucho mayor precio porque le han colocado una boina al ruedo… Amén.  Así yo también hago negocio. Tendrían que haber puesto la boina sólo a partir de la fila 15 del tendido, y con ello nos obligarían a sacar entradas de tendido bajo, barrera o contrabarrera, ¡qué falta de ambición...!
Y, me pregunto, ¿esas personas mayores o jóvenes del “gallinero”, dónde se colocarán si se vende el abono completo en uno de esos días? Imagínense que, por un milagro divino, o por la intercesión de San Pedro Regalado, el domingo de Resurrección la empresa programa un cartel de campanillas (desde luego tiene que haber intercesión del Altísimo...); imagínenlo. Y que todos los abonos de sombra, porque la reventa está en ello o porque a los de la multinacional de turno les da por ahí, sacan su abono junto con el aficionado habitual… Y se llena el diez bajo y casi el alto..., ¿dónde metemos a los “ancianitos” de la andanada del 10? En el cinco, acaso… Y si no quieren ver la corrida “al revés”, ¿qué? Si hay 14.000 abonos poco más o menos –después de la pérdida de éstos por la “incesante mejora en el espectáculo” de Taurodelta- y quedan 16.000 localidades libres, ¿no podría darse el caso de tener que reubicar a muchos abonados en otros tendidos? Eso sí para el “bastión de Taurodelta”, lo que importa es que con la cubierta, y augurando una entrada de 12.000 personas en Ramos o Resurrección, «la plaza daría el aspecto de llena, algo maravilloso y acogedor». ¡Qué monada! ¡Qué acogedor…! ¡Maravilloso! Doce mil personas llenando un coso de 24.000…, pues será que nunca antes se hubo llenado… ¡Qué gestión tan… maravillosa! ¿Pagarán estos festejos los taurodeltianos, o darán pagarés para final de temporada, o mejor para abril de 2014, a cobrar con el abono del siguiente año…?

Las pirámides de Gizah, algo que Martínez Uranga cita como ejemplo de arquitectura trasnochada
El “bastión de Taurodelta” arremete contra opiniones contrarias con sólidos argumentos: «Oiga, según esa teoría —dice el empresario—, estaríamos con las pirámides de Egipto en la Plaza Mayor. El progreso es el progreso, por mucho que algunos se inclinen por el sol y las moscas. Ya sé que Belmonte toreaba sin cubierta... Pero se puede ser purista y no ir contra la modernidad. Con lona o sin ella, la prioridad seguirá siendo el toro, pero ojalá podamos aprovechar la cubierta». ¡Toma ya! No sé qué tienen que ver las pirámides de Egipto en esto, si quizá cree que deberían construirse en la plaza mayor de Madrid, o si considera –quizá por la edad- que la plaza mayor madrileña (que data de 1619) es ejemplo de plena contemporaneidad arquitectónica… Pues claro que Belmonte toreaba sin cubierta, y Joselito, y Granero, Marcial, Chicuelo, Barrera o Villalta, y Gitanillo –Curro-, Manolito Bienvenida, Armillita o Cagancho, y Pepe Luis, Manolete o Dominguín, y Ordóñez, Camino, Puerta o el Viti, y Manolo Vázquez y Antoñete, e incluso Ojeda, Ortega Cano o César Rincón, y también Espartaco, Joselito, Ponce, José Tomás o Morante. Y todos cuantos en el mundo han sido, porque no ha existido cubierta en Madrid hasta el momento (aunque de lo que les ha servido a los taurodeltianos en Vista Alegre…). No sólo Belmonte, oiga… Y no ha pasado nada, más bien al contrario, han triunfado cuando tenían que triunfar, con sol y con lluvia, con viento y sin él. 

Curro Romero, Paco Camino, Diego Puerta y el mayoral de Benítez Cubero, en Las Ventas, algo que al parecer sólo es posible ya si se pone la cubierta
Pero, lo que todavía nos asombra más es que su prioridad “es el toro”, ¡atiza!, el toro. Madre mía…, pues bien que han hecho dejación de ello; basta con repasar cifras y números y ver el baile incesante de corrales de estos años… en el mismísimo San Isidro. ¡Qué desvergüenza! Dice que los contrarios a la imposición boinificadora gustan de “sol y moscas”. Pero si lo que nos venden habitualmente, precisamente, son carteles en forma de moscas tse-tse, que aburren y duermen al más pintado (repasen los últimos San Isidro). En la práctica demagógica habitual, en vez de buscar argumentos a favor, suele ser de extrema utilidad desacreditar al adversario mediante supuestas afirmaciones absurdas o gratuitas puestas en sus labios. “Sol y moscas”, dice Taurodelta a través de su bastión, que gustamos los que no queremos el tocado cefálico del coso. Pues mire usted, don listo, ni sol, ni moscas. Uno tiene su abono en sombra y las moscas… me mosquean. Así que ni sol ni moscas, pero allá cada cual, porque tan respetable es mi postura como la contraria. A usted, “bastión de Taurodelta”, al parecer sólo le gustan las cubiertas para que el aficionado pague tendidos bajos en vez de andanadas… ¿a qué la comparación le gusta, simpático mozo?

No para ahí la cosa, además, sino que la “oficialidad” madrileña ya ha resuelto que en caso de que a Madrid le correspondan los JJ.OO. de 2020 –Dios no lo quiera-, la plaza servirá de sede olímpica, con la citada cubierta para parte de los deportes que habrán de celebrarse, por ejemplo, baloncesto. Teniendo en consideración que los JJ.OO. se celebran en julio y agosto, es decir en plena temporada taurina… ya ven dónde nos conduce aquello. Además, las instalaciones habrán de estar preparadas y ser supervisadas con semanas o meses de anticipación, por lo cual… es posible que la temporada madrileña, si no se va al traste ese año, al menos se vea notablemente afectada. Ah, pero eso no importa, porque Taurodelta (que seguro sigue siendo la empresa para entonces, so pena de que González, a quien le parece la MEJOR EMPRESA DE LA HISTORIA –palabras suyas en la COPE ante el que subscribe- haya pasado a mejor, o peor, vida política) podrá organizar conciertos y galas musicales o quizá hasta espectáculos de toreo de salón en la cancha deportiva de Las Ventas. ¿Se acuerdan cuando doña Esperanza Aguirre organizó el máster de tenis…? Varios festejos al traste y aquí paz y después gloria económica… Pues eso elevado a la enésima potencia. ¡Qué bonita es la cubierta! Ahora que como empiecen a oírse crujidos, chasquidos o se vean leves movimientos de las varillas del paraguas, lo del Madrid Arena puede quedarse chico…
Y puestos a ello, ¿por qué no cubrimos el Bernabeu, el Calderón, el circuito del Jarama o el hipódromo de la Zarzuela, la pradera de san Isidro o la Casa de Campo? Sin viento y sin mojarse... todo sería siempre mejor, el Madrid y el Atleti siempre ganarían -excepto en enfrentamientos entrambos-, los pilotos no correrían... peligros meteorológicos, los caballos no cogerían una pulmonía -que para algo les ponen mantas, como quiere Uranga con nosotros-, los isidros bailarían felices y la paz y la conjunción serían felizmente universales. 

3 comentarios:

  1. No podemos contentarnos con ejercer el absurdo derecho al pataleo. La protesta tiene más cauces. Por ejemplo, el BOICOT por parte de los aficionados a corridas o novilladas de marzo y abril hasta que retiren la boina.

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  2. Entiendo que los aficionados que somos abonados de las Gradas y Andanadas no le interesamos a los nefastos gestores "Choperitas" que desde que están no han sido capaces de llenar la plaza. Y ahora se les ve el plumero, quieren hacer más dinero dando otros espectáculos en Las Ventas. Y se lo autoriza, el gran aficionado que fue, Carlos Abella, de da el conforme el Consejero de la Presidencia, y el aficionado de boquilla, no elegido por votación, sino por ir en la lista, el nefasto actual Presidente de la Comunidad.

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  3. Es inconcebible, hay que protestar como dice el anterior contertulio, el derecho al pataleo que nos queda para que la retiren, porque esto se va al traste.

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